Quizá alguna vez necesites adquirir algún tipo de crédito o incluso algún préstamo monetario para lo cual las instituciones financieras seguramente revisen tu comportamiento financiero dentro del Buró de Crédito, de esta forma se sabe si eres un cliente confiable o no.

Si tienes un mal historial crediticio puedes tener limitaciones para adquirir servicios financieros, por ello debes cuidar que tu perfil dentro del Buró de Crédito sea positivo, ya que así como queda registrado lo bueno que seas en el manejo de tus deudas, también sucede con lo malo y estas deudas tardan mucho en eliminarse.

En nuestro país, toda actividad crediticia –de personas y empresas– se incluye en el reporte mensual del Buró de Crédito, una Sociedad de Información Crediticia (SIC) encargada de reunir la información de cada crédito que adquieres, sus pagos y adeudos. Se comparte con entidades financieras previa autorización del interesado a fin de hacerles saber si el solicitante es un pagador responsable o no.

Esto quiere decir que desde el momento en el que solicitas un crédito ya estás en el Buró de Crédito, esto no depende de si pagas o dejas de pagar, sirve para integrar tu historial crediticio en donde generas un registro desde que solicitas un financiamiento y no precisamente cuando tienes problemas para pagar. Si tu historial crediticio es bueno, te abrirá las puertas a futuros créditos, en cambio, si es malo, te cerrará las mismas.

Por otra parte, las instituciones bancarias usan dicha información para evaluar qué producto financiero o préstamo se adecua a tu capacidad de pago, sin riesgo de caer en un incumplimiento.

Además, no solo investiga tu historial crediticio, hay muchos otros factores que se consideran antes de otorgarte un crédito como: la edad, tus ingresos, si tienes dependientes económicos, etcétera.

Logra un buen historial crediticio dentro del Buró de Crédito

El tipo de calificación que te ponga el Buró de Crédito y todas las observaciones de tus pagos son tu carta de presentación ante las instituciones financieras el día que quieras solicitar algún producto de crédito u otras oportunidades de financiamiento a futuro.

En el momento que comienza el historial crediticio de una persona, toda su actividad se registra en el Buró sin que necesariamente tenga una implicación negativa. Mantener una buena reputación financiera tiene beneficios importantes como: aumentar la línea de crédito de tarjetas, obtener créditos hipotecarios, acceder a créditos de auto, tener créditos empresariales o comerciales, tarjetas departamentales y préstamos de nómina o personales.

De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) existen algunas medidas que puedes adoptar para construir un buen historial:

  1. Domiciliar pagos de servicios como luz, gas, teléfono, TV de paga.
  2. Liquidar el total de la deuda de una tarjeta de crédito mes con mes, lo que evitará el incremento del adeudo debido a los intereses.
  3. Consultar periódicamente el historial crediticio y los diferentes servicios del Buró de Crédito.

El control de las finanzas personales permite llevar a cabo una planeación adecuada para evitar deudas que en el futuro pueden ser impagables. Si quieres pedir un préstamo y no hay información crediticia sobre ti, el banco o entidad prestamista no sabrá si cumples con tus obligaciones, por lo que no podrá saber si afrontas bien tus deudas o no y en la mayoría de los casos no aceptarán tu solicitud.

Tienes que saber que todas las entidades bancarias o de crédito pueden consultar el historial crediticio de cualquier persona con diferentes propósitos ya que dentro del Buró se lleva el registro de actividades como pagos a cualquier tipo de financiamiento.

El informe que reciben estas instituciones contiene la siguiente información:

  • Cuántos créditos has tenido.
  • Cómo te has comportado con estos créditos (por ejemplo, cuándo y cómo has pagado, si has tenido retrasos o acciones legales contra ti).
  • Si alguna vez tuviste algún retraso, cuándo volviste a pagar puntualmente.
  • Las cantidades de los créditos que has pedido.
  • Y el monto del último pago y el saldo deudor.

Consulta tu historial crediticio

Puedes consultar tu historial crediticio (reporte de crédito especial) de forma gratuita una vez al año (pero las consultas posteriores en el mismo periodo, tienen un costo adicional), el cual refleja el patrón de cumplimiento del consumidor en relación con cada crédito, el número de créditos solicitados y con qué instituciones.

También sirve para detectar anomalìas como consultas no autorizadas por ti, créditos no solicitados, deudas por pagos que tal vez sí realizaste, etcétera.

Para solicitar una consulta debes tener a la mano tu identificación oficial (IFE, INE, Pasaporte, Forma Migratoria para extranjeros), copia de los estados de cuenta de tus créditos monetarios, hipotecarios y/o automotrices, pues varios de los datos que necesitas se encuentran ahí.

Estos datos son los mínimos requeridos por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y por la Ley para Regular las Sociedades de Información Crediticia.

Al momento de consultar el reporte se sabrá: historial crediticio y quién más lo ha consultado, además se puede verificar que la información esté correcta y actualizada con apoyo de un asesor autorizado.

Estatus de los pagos

El historial crediticio permanece en la base de datos durante un plazo de 72 meses contados a partir de la fecha de liquidación, siempre y cuando el otorgante de crédito haya reportado la fecha de cierre o la última vez que reportó al Buró. Éste únicamente elimina registros de acuerdo con lo establecido en la Ley.

De acuerdo con dicha Ley, la deuda se mantendrá registrada durante determinado tiempo en el Buró y será eliminada solamente del historial crediticio en función del monto:

Después de un año, se eliminarían del Buró las deudas menores o iguales a 25 Unidades de Inversión (UDIs), es decir, unos 160 pesos, según el Banco de México.

Las deudas mayores a 25 y hasta 500 UDIs (3 mil 215 pesos) se descartan después de dos años; las mayores a 500 y hasta mil UDIs (6 mil 430 pesos) después de cuatro años.

Aquellas deudas menores a 400 mil UDIs (2 millones 572 mil pesos) se eliminan en seis años siempre y cuando no se encuentre en proceso judicial o no se haya cometido algún fraude crediticio. Las deudas mayores a 400 mil UDIs nunca se eliminan del Buró.

Si tuviste retrasos o incumplimientos no tienes que esperar a que se borre la información para que mejore tu historial crediticio. Si te pones al corriente, esto se reflejará y mostrará que estás cumpliendo con tus pagos.

La Condusef indica que no existe una forma de “limpiar” tu Buró de Crédito que no sea pagando tus deudas o dejando que pasen años. Quienes creen que es una lista negra, buscan la forma de salir rápidamente. Pero si los otorgantes no tienen información sobre tus antecedentes crediticios, ni pueden corroborar la información de tu solicitud y no habrá historial que la respalde.

El no confiar en ti hará que decidan no concederte un crédito y si lo hacen será con intereses muy altos.

Es por ello que “prefieren” conocer a alguien que se ha atrasado un par de veces en los pagos a tener en cuenta a una persona que no tiene ningún tipo de información al respecto.

Tu historial en el Buró de Crédito puede ser tu mejor carta de recomendación. No te cierres las puertas.